El jet lag es una alteración del reloj interno del cuerpo, provocada por un cambio repentino de huso horario. Disuade a algunos viajeros de ir muy lejos para evitar alteraciones del sueño, cambios de humor, etc. De hecho, una gran diferencia entre husos horarios puede alterar gravemente nuestro organismo. Por eso es esencial saber cómo afrontar el jet lag. Aquí tienes nuestros consejos.
Nuestros consejos antes de viajar
El objetivo es adaptarte a la futura diferencia horaria antes incluso de poner un pie en el extranjero. Así que tienes que prepararte bien antes de partir, adoptando un ritmo de vida diferente al que estás acostumbrado. También tienes que prepararte físicamente para que tu cuerpo pueda adaptarse a la diferencia horaria que experimentarás. Esta preparación depende del lugar al que quieras ir. Para un viaje al continente americano, lo ideal es empezar el día más tarde y acostarse más tarde. Por el contrario, para un viaje a Asia deberás levantarte antes y acostarte más temprano.
Para estar en mejores condiciones cuando llegues, intenta planificar tu viaje de modo que llegues a tu destino durante el día.
No querrás dormir cuando llegues. Por último, puede ser una buena idea comer antes de subir al avión para que puedas dormitar durante el viaje y llegar más descansado. También puedes tomar un vuelo con escala, para que tu cuerpo tenga más tiempo para adaptarse a su nueva rutina.
Nuestros consejos en el avión
Es aconsejable fijar la hora en tu destino en cuanto subas al avión. Esto puede ayudarte a acostumbrarte psicológicamente. Durante el viaje, bebe mucho para limitar la deshidratación. Aunque beber probablemente no te ayude a conciliar el sueño, reducirá los efectos negativos del jet lag debidos a la deshidratación, como :
– Insomnio nocturno
– Somnolencia diurna
– Fatiga
– Dolores de cabeza
– Problemas digestivos
– Dificultad de concentración
Sin embargo, evita el alcohol, el café y otras bebidas estimulantes, que pueden alterar tu organismo.
Tu viaje debe permitirte descansar, no excitarte. Por último, pero no menos importante, no tomes somníferos. Además de los peligros potenciales de tomar somníferos en altitud, es aún más desaconsejable tomarlos cuando se está preparando un viaje al otro lado del mundo.
Lleva contigo una almohada especial para el cuello, tapones de espuma para los oídos y un parche para los ojos. Le proporcionarán un mínimo de descanso y, aunque no tenga la sensación de estar durmiendo, su cuerpo podrá relajarse. Le recomendamos encarecidamente que descanse, ¡aunque tenga la tentación de ver todas las películas en el avión!
Nuestros consejos para llegar a tu destino
Se calcula que los efectos del desfase horario duran tantos días como el número de horas de desfase horario.
A pesar de la tentación, y aunque tengas el cuerpo entumecido por el viaje, no te duermas enseguida cuando llegues a tu destino. Si no puedes mantenerte en pie, opta por una siesta de veinte minutos. De lo contrario, es muy probable que te despiertes en mitad de la noche y en plena forma.
Una vez que hayas llegado a tu destino, es importante sincronizarte con la hora local, de lo contrario te quedarás rezagado, lo que no es muy relajante. Para ello, mantente despierto hasta la hora de acostarte, aunque te resulte difícil. La luz del día tiene un efecto positivo sobre el jet lag. La luz es uno de los principales aliados de nuestro reloj biológico, ya que le ayuda constantemente a regularse y a reajustarse si es necesario. En cambio, la exposición anárquica a la luz (como en el caso del trabajo nocturno, por ejemplo) tiene tendencia a interferir en su funcionamiento.
Recuperarte del jet lag a tu regreso
A la vuelta de un viaje, también hay una serie de consejos que te ayudarán a recuperarte más rápidamente del jet lag. Lo mejor es acortar la estancia uno o dos días para darte tiempo a recuperarte y volver a la rutina, en lugar de volver al trabajo apenas descansado.
Por último, durante este periodo, renuncia a las pantallas. Si quieres dormir, y sobre todo dormir bien, tienes que mantenerte alejado del teléfono, la tableta, el portátil…
La «mente» es, por supuesto, muy importante.
Así que si te pones en marcha pensando que el jet lag no me cansará, seguro que te mantendrás más activo que si te dices lo contrario… ¡Disfruta de tu viaje y pasa unas vacaciones estupendas! No olvide su seguro de viaje para unas vacaciones sin preocupaciones.
