Se calcula que entre 2 y 2,5 millones de franceses expatriados están inscritos en el consulado de Francia en el extranjero. En realidad, esta cifra es superior si se suman todas las personas que no están registradas, para acercarse a los 3 millones de expatriados franceses. En términos más globales, con no menos de 230 millones de personas viviendo en un país distinto al suyo, las cifras de un reciente estudio muestran que la expatriación se ha convertido en una parte normal del paisaje de la movilidad. Si usted también está en movimiento, si la expatriación le atra e pero no se atreve a dar el paso, aquí tiene 10 buenas razones que podrían ayudarle a decidirse.
Dominar una lengua extranjera
«Inglés fluido»: ¿quién no ha soñado con escribir eso en su CV y que sea verdad? Y sí, el francés y los idiomas no se llevan bien. Así que mucha gente escribe «inglés fluido» sin manejar necesariamente una conversación.
Con la expatriación, la cuestión ya no se plantea. Es unaoportunidad para trabajar y perfeccionar una o variaslenguas extranjeras. Dependiendo del país, podrá aprender el idioma local (imprescindible si quiere encajar) y el inglés, que sigue siendo la lengua más hablada del mundo, ya sea en su vida profesional o conociendo a otros expatriados extranjeros. Si de verdad quieres progresar, te doy un consejo: no te limites a ser francés.
Completar su CV
Como hemos mencionado en el apartado anterior, un idioma extranjero ya es una ventaja importante en tu CV. Pero la experiencia en sí es un enriquecimiento a nivel profesional y dice mucho de tu personalidad. Demuestra que tienes movilidad, eres abierto de mente y no te asustan los cambios, cualidades que buscan los reclutadores.
Aprovechar nuevas oportunidades profesionales
La situación del empleo en Francia no es precisamente halagüeña en estos momentos, y algunos países ofrecen más oportunidades a personas con antecedentes atípicos, o que simplemente son demasiado jóvenes para ocupar puestos de responsabilidad en Francia, pero están dispuestas a invertir plenamente en su trabajo. Si estás en paro o acabas de graduarte, irte al extranjero puede facilitarte la búsqueda de empleo.
Si es su jefe quien le sugiere que se traslade a trabajar al extranjero, probablemente sea para ofrecerle un puesto con más responsabilidad o para ascender en la jerarquía. Aproveche la oportunidad. Negarse sería privarse de una oportunidad increíble de acelerar su carrera.
Un salario más atractivo
Si tiene la oportunidad de irse al extranjero como expatriado para su empresa, sin duda se beneficiará de un salario muy cómodo, así como de alojamiento local.
Si vas por experiencia personal y profesional, quizá puedas encontrar un puesto mejor pagado en el mismo país, pero asegúrate de comprobar el coste de la vida allí antes de lanzarte de cabeza a tu proyecto. No olvide tener en cuenta los gastos de alquiler y alojamiento, que en algunos países son más elevados que en Francia.
Abrirse a nuevas culturas
Expatriarse significa descubrir una cultura totalmente nueva.
Empezando por la lengua, la historia, las costumbres, la comida y los hábitos del país elegido. Es una oportunidad de ver el mundo con otros ojos, de entender las situaciones de otra manera. Es probable que vivas nuevas experiencias que te abrirán nuevos horizontes y cambiarán tu forma de enfocar ciertas situaciones.
La gente no pensará necesariamente como tú. Tener una mentalidad abierta te ayudará a entender toda la nueva cultura y a adaptarte mejor.
Hacia una mejor calidad de vida
Si sientes que tu vida avanza a 100 km/hora, que no disfrutas de nada, que no te sientes realizado en tu vida actual: individualismo, falta de intercambio y de compartir: todo esto te pesa. El ritmo frenético de la vida en la gran ciudad ya no le conviene. Puede que sólo necesite trasladarse a otra región, pero también puede que sea en el extranjero donde encuentre su felicidad. La expatriación puede darle un nuevo gusto por los pequeños placeres. Si no se trata de idealizar el país de sus sueños, puede ser más de su agrado.
Paisaje y clima cambiantes
Redescubra el placer de las actividades después de la jornada laboral: surf, deporte, playa… ¿Por qué no regalarse unas vacaciones durante todo el año?
El entorno y el tiempo influyen mucho en la moral. Los problemas cotidianos se borrarán más rápidamente si tienes detrás una vida idílica: sol, naturaleza. Por otra parte, a veces lo que hemos idealizado toda la vida resulta no ser lo que queremos. Así que analice bien sus prioridades antes de elegir destino. La expatriación no es una decisión trivial que se toma de la noche a la mañana.
Abrir la mente a sus hijos
Hablamos de enriquecimiento para usted, pero si tiene familia, es una oportunidad para que sus hijos se beneficien de esta mezcla cultural y aprendan varios idiomas. Esta experiencia en otro país les dará una mentalidad abierta que les servirá para el resto de sus vidas.
Sólo el regreso a Francia puede ser difícil, al quedar aislado de los amigos en el acto, aunque los numerosos servicios actuales de mensajería instantánea permiten mantenerse rápidamente en contacto con todo el mundo.
Conocer gente nueva
Irse significa hacer nuevos amigos. Es una oportunidad para intercambiar ideas, aprender y aprender unos de otros. Ya sea con nativos o con expatriados extranjeros, cuanto más abierto y sociable seas, más probabilidades tendrás de hacer nuevos amigos. Llegar a un país nuevo te hará más abierto de mente.
A la inversa, también aprenderás a salir por tu cuenta, porque seguro que hay tardes en las que no sabes qué hacer. Es otra forma de descubrir lugares y conocer gente nueva.
Cambiar la rutina
Aunque todos digan que «huyen de ella», siempre se instala la rutina. Eso no es necesariamente malo, pero es una comodidad de estilo de vida que nos permitimos. Así que no espere demasiado antes de cambiar las cosas. Dar un paso atrás en tu vida y alejarte de ella para vivir una nueva experiencia sólo será más gratificante para ti.
Todos estos factores son motivos reales para trasladarse al extranjero, pero la decisión debe meditarse detenidamente. Expatriarse también significa asumir riesgos, por lo que depende de usted estar bien preparado. Y no olvide que el seguro médico internacional es esencial para que la expatriación sea un éxito.